En las ciudades se producen desechos diversos, siempre y cuando estos no estén catalogados como peligrosos se les llama residuos sólidos urbanos. Surgen de todo aquello que ya no se necesita en las comunidades, desde desechos del hogar hasta escombros de construcciones.
En este artículo, te explicaremos los tipos de residuos sólidos urbanos, su tratamiento de disposición y las mejores recomendaciones para reducir su producción desde el hogar.
¡Comencemos!
Tipos de desperdicios urbanos
Tomando en cuenta todo lo que se catalogue como desecho, según su composición podemos clasificarlos en:
- Materia orgánica (desechos alimenticios o restos de jardinería)
- Papel y cartón (cajas, periódicos, revistas)
- Maderas (Todo tipo de muebles del hogar)
- Textiles (ropa, manteles)
- Metales (latas e todo tipo)
- Plástico (botellas, envases, envoltorios)
- Vidrio (frascos, botellas, vasos)
Para el tratamiento de los residuos sólidos urbanos se recoge toda la basura en general y se filtra basándose en su estructura. Posteriormente, es llevada a plantas donde según su tipo, se le da el tratamiento adecuado para su reciclaje. En instancias finales es convertida en nuevos materiales que pueden ser aprovechados.
No obstante, aun cuando existen maneras de tratar todos los desechos es recomendable que limitemos la producción de los mismos. Recomendamos que la acción de reciclar y convertir elementos en nuevos materiales también genera un impacto en el ambiente. La idea es causar el menor daño posible a la naturaleza.
Los 5 mejores consejos para reducir la generación de residuos sólidos urbanos
Poner en práctica estas acciones ayudará al cuidado del ecosistema y también mejorará nuestra calidad de vida.
1. Reutiliza los empaques
Hay muchos productos que podemos reutilizar para evitar descartarlos. Por ejemplo: los envases de vidrio, plástico y botellas sirven para usos posteriores.
La idea es tratar de usar estos residuos en el hogar, son bastante útiles para guardar comida en el congelador y las botellas para el almacenamiento de agua.
2. Separa la basura
Filtrar los desechos resulta bastante favorable para la naturaleza, un consejo es separar la basura orgánica de los materiales secos. De esta manera, quien se encarga de recoger los desperdicios en el domicilio puede acelerar el proceso de reciclado posterior.
No olvides dejar todo bien sellado para evitar restos en las calles.
3. Compra productos sin empaques
Los envoltorios son uno de las sobras más frecuentes en el hogar, más aún cuando casi toda la comida viene en algún tipo de empaque. Comprar alimentos a granel en los mercados es una práctica que disminuye la producción de residuos sólidos urbanos. Es importante también tratar de llevar tus propias bolsas cuando vas de compras.
4. Reutiliza tu ropa
Todos tenemos ropa que creemos que está pasada de moda, sin embargo, la tela tiene muchísimos usos prácticos. Puedes utilizarla para hacer otras cosas como fundas para cojines, monederos, e incluso crear nuevas prendas a partir de retazos que parecen no ser útiles.
5. Impresiones en el hogar u oficina
Al momento de imprimir documentos es importante sacar el mayor provecho al papel que se está utilizando, usa la cara de la hoja que está desocupada tanto para la impresora como para la escritura. Recuerda que la idea es producir la menor cantidad de residuos sólidos urbanos.
Aliados para la recolección de residuos sólidos urbanos
En Red Ambiental se ofrecen servicios de recolección de residuos sólidos urbanos a domicilio, así como también nos encargamos del manejo integral de todos los desperdicios. De ese modo, llevamos todo a vertederos sanitarios donde sean desechados con el menor impacto ambiental posible.
Nuestro director, Horacio Guerra, resalta la importancia de disminuir y tratar los residuos sólidos urbanos, ya que, si no se toman acciones inmediatas es probable que la tierra se convierta en un vertedero de basura que afecte a todos los que habitan en ella.